Muy
a menudo vienen pacientes con síntomas de “
almorranas”, sin embargo, al
realizar su chequeo y después de varios estudios hemos detectado que no era tal
padecimiento que ellos pensaban. Al realizar el análisis completo de estudios y
de una serie de preguntas, se llega a la conclusión de que todo el origen
estaba en el aseo de cuando la persona termina de hacer sus
necesidades
fisiológicas. Se ha detectado que los pacientes no estaban haciendo la
higiene de manera correcta y que, aunado a eso, el
papel sanitario
actuaba como una “lija” de cierta manera. Con el paso del tiempo y el
exceso
de limpieza se va irritando el colon a tal grado que la sensación y
malestar era similar al padecimiento de “hemorroides”.
En
estos casos se concluye que dichos pacientes tienen que cambiar sus hábitos
de limpieza. Cada persona tiene metabolismos diferentes y reacciones a
productos que cuando tocan nuestro cuerpo, por lo que se hacen demasiado
sensibles al uso de ellos. Por ejemplo, los detergentes, jabones con los que se
lava la ropa interior, papel sanitario, tipo de retrete, etc.
Además
de cuidar todo lo anterior, también es recomendable acudir al médico de manera
periódica, y así evitar futuros problemas de salud.